“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura….”
(Mateo 16, 15)
Caminando juntos hacia Cristo
Recientemente la Diócesis de Málaga ha hecho públicas las Prioridades Pastorales para este curso. Llevándolas a la práctica, los cristianos malagueños caminamos contemplando la meta de la identificación con Cristo y de la salvación eterna. Es por ello que debemos conocerlas y cuestionar cómo podemos aplicarlas a nuestra vida
Primera prioridad: «Acometer en las parroquias la “transformación misionera” propuesta en la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium»
Afirma el vicario general de nuestra Diócesis que la parroquia está llamada a ser centro de vida, lugar desde donde se irradia la pastoral, donde se desarrolla la vida sacramental y el resultado de la misma, desde la Iniciación Cristiana hasta las exequias. La clave es ser parroquia en salida, pero también lugar de encuentro, desde el primer anuncio.
¿Vives como si Dios, los demás y los pobres no existieran? ¿Cómo puedes, como laico y miembro de tu parroquia, llevar a cabo la misión de la Iglesia?
Segunda prioridad: «Renovar la pastoral familiar a la luz de Amoris laetitia, y promover el acompañamiento»
La Diócesis quiere renovar la pastoral familiar en conformidad a la doctrina de la Iglesia, para lo que propone el acompañamiento de la comunidad parroquial a quienes van a realizar su vocación al matrimonio. Eso implica una necesaria renovación de las catequesis de preparación al matrimonio, insistir en la formación de los catequistas y en la acogida e inserción de estos matrimonios en las comunidades.
¿Cómo acompañas a los nuevos y futuros matrimonios? ¿Les animas a vivir su vocación desde la fe? En el caso de que estés en el camino hacia el matrimonio, ¿enfocas tu vida matrimonial dentro de tu comunidad parroquial? ¿Cómo podrías hacerlo o mejorarla?
Tercera prioridad: «Seguir impulsando la pastoral vocacional»
La tarea de animar a los jóvenes a discernir su vocación y acompañarlos en su llamada al sacerdocio, a la vida
consagrada y al matrimonio, siempre ha sido una prioridad en la Iglesia, y más aún en la Diócesis de Málaga. Debemos continuar esta tarea de animar a los jóvenes ante la llamada del Señor, discernir y acompañar a los candidatos al sacerdocio y a la vida consagrada.
¿Animas a los jóvenes a escuchar la llamada que el Señor les hace?