La Familia Agustiniana venera a la Virgen María con el título de Nuestra Señora de Consolación y Correa. La Coronilla que se recita en su honor y que durante la procesión del Mater Dei rezaremos a Nuestra Señora de la Caridad, pertenece a la tradición de la Orden de San Agustín y ha reunido en el curso de la historia a muchos hermanos y hermanas en oración alrededor de María, como se reunía alrededor de ella la primitiva comunidad apostólica.
Esta devoción es una oración plena de vitalidad, que nos ayuda en el camino de la fe junto a María, en una especie de “peregrinaje interior en el Espíritu Santo”, a través de las verdades tomadas del Símbolo Apostólico.
Al unir, en la misma expresión de fe, el Credo con la figura de María, consideramos que no hay para nosotros, como parte de la Familia Agustiniana, una manera mejor de orar en la tarde-noche en la que Nuestra Buena Madre de la Caridad es procesionada de manera extraordinaria con motivo del Año de la Fe.
Seguiremos el esquema más breve y sencillo de la Coronilla que consiste en la proclamación de cada artículo del Credo seguido por una invocación a la Stma. Virgen y el rezo compartido del Ave María.