El pasado domingo, 25 de agosto, tuvo lugar el tradicional traslado de la imagen de nuestra Patrona hasta la Catedral, donde presidirá la novena que precede a la fiesta del 8 de septiembre.
En esta ocasión, la bajada tuvo un carácter especial que, sin duda, la convierte en histórica: la Virgen de la Victoria bajo desde el Santuario junto con la imagen del Stmo. Cristo Resucitado, Titular de la Agrupación de Cofradías, la cual ha estado recibiendo culto desde el pasado mes de julio en la Basílica victoriana, como uno de los “focos de fe” que ha congregado a los cofrades de las hermandades del entorno en diferentes momentos de formación, oración y celebración.
A la bajada del Resucitado y la Virgen de la Victoria acudió una gran cantidad de fieles y devotos y entre ellos, un numeroso grupo de cofrades del Amor y la Caridad que se integraron en el cortejo de acompañamiento, portaron las andas del Señor Resucitado y colaboraron en la organización del acto. Como cada año, la procesión discurrió con el rezo del Rosario.
Instantánea del Diario Sur.